En el día de hoy se ha publicado el Manifiesto de OCRE, en castellano y en las lenguas cooficiales de los diferentes territorios, con varias reclamaciones para la mejora de nuestro sistema educativo.
- Una escuela pública cuya función central sea la adquisición de conocimientos sólidos; que permita el acceso a la cultura de toda la población, ya que esta es la vía que garantiza la formación de una ciudadanía competente, capaz de regir su propia vida y tomar decisiones con criterio, porque la escuela es el único lugar donde el alumnado de extracción social humilde podrá adquirirla.
- Un currículo claro, estructurado, coherente, realista y bien secuenciado, para garantizar la igualdad de oportunidades de todo el alumnado, en todos los centros, independientemente de su localización geográfica, contexto social, económico y cultural, porque el conocimiento compartido es la base de una democracia más justa.
- Una ley educativa guiada por la investigación didáctica; alejada de la influencia de modas y neuromitos sin sustento científico, que se aplique con progresividad, evaluando y analizando de forma sistemática sus efectos sobre el aprendizaje, y que goce de la estabilidad imprescindible para generar la confianza que todo sistema educativo necesita para tener éxito en sus objetivos.
- La recuperación del respeto por la profesión docente, que se debe concretar en la devolución de las competencias educativas a los claustros, en la dotación de recursos humanos suficientes para atender la diversidad del alumnado y en la potenciación de la especialización y formación didáctica de los docentes, basada en la evidencia científica en sus respectivos campos de conocimiento.
- Una inclusión efectiva, sustentada en la dotación de recursos económicos y humanos suficientes y no meramente a través de la formulación de buenas intenciones inaplicables en las condiciones existentes en los centros. Exigimos que se garanticen las condiciones materiales que la hagan posible a través de la memoria económica que debe acompañar a la ley.
- La devolución de la soberanía educativa a la ciudadanía, poniendo freno a presiones externas de entidades supranacionales de carácter político y económico, que no son democráticas y que son totalmente ajenas al mundo educativo.
Los objetivos de la asociación quedan plasmados en los puntos anteriores y, como asociación, OCRE ofrece su colaboración para encontrar soluciones desde el conocimiento profundo de lo que acontece en las aulas, la experiencia de años de enseñanza, el saber pedagógico de los contenidos, el empeño en mejorar la formación de los estudiantes y la convicción de que la educación es el pilar que sostiene una sociedad equitativa y justa.
Podéis descargaros el manifiesto en la página web del mismo y adheriros al mismo, tanto de forma individual como colectiva.
Adhesión al manifiesto (individualmente)
Adhesión al manifiesto (de forma colectiva)
La unión hace la fuerza.